La empresa nipona CrazyLabo junto con el Instituto de Tecnología de la Universidad de Kitakyushu (sur del país) han creado dos modelos de robot, uno con forma de cabeza de mujer y otro de perro, para avisar en casos de mal olor de pies y aliento.
Cuando se activan, ambos robots son capaces de reconocer y catalogar el olor del aliento y los pies con un sensor, y reaccionar de manera exagerada con la intención de que el usuario tome medidas para solucionarlo.
Una vez el usuario le echa el aliento, lo cataloga y emite una respuesta irónica dependiendo de los resultados.
El perro Shuntaro reconoce el mal olor de pies y aunque no habla como la humanoide, agita la cabeza si el olor es normal, ladra y gruñe si es malo y se desmaya en el caso de que se trate de un olor muy fuerte.
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